En medio de la oscuridad y el miedo del conflicto, los equipos de OM en Ucrania han estado trabajando para llevar luz y esperanza a la comunidad.
Mientras el pueblo de Ucrania se acerca a su tercer invierno en medio del conflicto, uno de los trabajadores de OM en el país reflexiona sobre los desafíos y las oportunidades de los últimos seis meses.
La mayoría de las personas conocen a alguien que está sirviendo en el ejército, y muchos han perdido amigos o familiares. Hensie de Sudáfrica, una de las trabajadoras de OM en Ucrania, no es la excepción. “Ahora tengo ocho amigos sirviendo en el ejército y dos personas que conocía personalmente han caído en el frente de batalla”, compartió.
“Lo que sucede no es fácil de ver. A eso se suma la cantidad de tumbas recién cavadas y las fotos de soldados caídos en las plazas de ciudades y pueblos por toda Ucrania, y el corazón apenas si puede soportar ver tanto dolor.
“Para ello está la cruz. La cruz de Cristo que puede y que ha cargado con todo el dolor y que sigue cargando cada corazón dispuesto a entregarle ese dolor. Dios ha hecho posible que OM en Ucrania continúe sirviendo y apoyando a quienes lo necesitan.”
Ofreciendo apoyo
En Rivne, el equipo de OM lidera un ministerio de crisis que apoya a personas desplazadas dentro del país, refugiados, niños que han perdido a sus padres en la guerra y en las fuerzas policiales. El equipo, liderado por Oleg (Ucrania), líder de ministerio de OM y dirigente principal, apoya a un grupo de 25 lideres policiales en Rivne, ofreciendo atención pastoral esencial y capacitación que fortalece la resiliencia del personal de las fuerzas del orden. Su colaboración con la academia de cadetes de policía, integra el evangelio en las vidas de los oficiales y cadetes, al tiempo que aborda sus desafíos únicos.
También ofrecen momentos de descanso mediante actividades como pesca, competencias de fútbol, manejo del estrés y ejercicios de trabajo en equipo. Recientemente, durante una excursión, el equipo de OM apoyó al ministerio llevando a pescar a los soldados de un centro de rehabilitación que habían perdido extremidades
Además, el equipo distribuye paquetes de alimentos y opera un ministerio que trabaja en carpas de invierno, ofreciendo abrigo, té y cuidado pastoral. También coordinan un estudio de arte y un club de inglés, ofreciendo a los niños sanidad y esperanza mientras comparten el amor y el evangelio de Cristo.
Oleg compartió la historia de Tanya*, quien encontró sanidad en el arte después de perder a su padre en el frente de batalla. “Inicialmente abrumada por el duelo, descubrió alegría en la pintura, expresando sus emociones a través de sus obras”, dijo él. “Ganar el concurso internacional de dibujo infantil “Maravilla de la Navidad” despertó su creatividad. Ahora, asiste con alegría a las clases de pintura, mostrando cambios positivos notables en su estado emocional. Es un privilegio presenciar su transformación a través del arte y la renovación de su espíritu.”
También se han realizado actividades con ancianos, viudas de guerra y huérfanos, además de seminarios para lideres y ejercicios de formación de equipo para socorristas.
Llevando esperanza a todos
En junio y julio de 2024, las principales ciudades enfrentaron cortes de energía de hasta 16 horas al día debido a los daños causados por ataques con drones y misiles. A pesar de esto, los equipos de OM continuaron llevando a cabo un programa de verano con campamentos, clases de arte, un centro diurno y, junto con el ministerio de deportes de OM, sesiones de entrenamiento en la ‘Escuela de valentía’ de kickboxing y de crossfit.
Hensie dijo: “En junio, todos nuestros equipos se reunieron para apoyar a una pequeña iglesia en la ciudad de Borodyanka. Durante tres días, parte de nuestro equipo trabajó con niños en la plaza pública. Nuestros entrenadores de ‘aprendizaje a través de la experiencia’ capacitaron al equipo de la iglesia local, así como a otros equipos visitantes, en el trabajo con adolescentes.
“Un grupo de seis miembros de OM se unió a miembros de la iglesia local y trabajadores sociales para visitar a ancianos necesitados y distribuir ayuda humanitaria. El último grupo trabajó cortando madera para hacer briquetas de carbón para el invierno, que la iglesia local utilizará para alcanzar a su comunidad.
“En el último día, el pastor local y su equipo agradecieron a OM, diciendo que hemos sido un catalizador para su iglesia. Explicó que, antes del apoyo de OM, no podían ver la mitad del potencial que Dios había puesto en su pequeña congregación y que ahora están inspirados para transformar la ciudad para Jesús. Actualmente, están construyendo un pequeño salón de iglesia y ya sueñan con adquirir el terreno vecino para realizar un campamento de verano para niños en el futuro.”
Luz en la oscuridad
El proyecto más cercano al corazón de Hensie este verano fue el último campamento: una experiencia teatral inmersiva. El equipo de OM en Odesa recibió a un grupo de 21 voluntarios, la mayoría adolescentes, para servir a 36 niños de entre 8 y 12 años.
“Más de la mitad de estos niños tienen un padre o una madre en el frente de batalla en la guerra, y algunos han enterrado a sus padres durante el último año”, dijo ella. “El tema del campamento fue “un lugar donde no habrá más oscuridad y el Camino para llegar allí”. Actualmente, con los cortes de energía y la falta de luz durante el toque de queda impuesto por la ley marcial, los niños que viven en Ucrania son muy conscientes de lo aterradora que puede ser la oscuridad, especialmente durante los ataques aéreos."
Los voluntarios, que se autodenominaron “El gremio de los Aventureros”, recibieron a los niños como ‘jugadores’ en el mundo de Eclipsia, con el objetivo de encontrar la fuente de la oscuridad que llena nuestro mundo. A través de misiones cuidadosamente diseñadas, lecciones bíblicas de descubrimiento y otras actividades, los participantes finalmente encontraron el templo del sol negro, donde descubrieron que el pecado en nuestros propios corazones es lo que causa la oscuridad en el mundo. Por supuesto, también descubrieron Quién es la Luz que vino al mundo y que la oscuridad, por más terrible que sea, no puede vencer a nuestro Señor y Salvador.
“Con todos los desafíos que enfrentamos, es fácil enfocarse en lo negativo. Sin embargo, Dios ha sostenido a nuestro equipo en Ucrania hasta aquí, y creemos que Él continuará haciéndolo, inspirándonos con esperanza para compartir”, dijo Hensie.
“Por favor, oren por nosotros mientras continuamos trabajando.”
*nombre cambiado